¿Qué puede ser más divertido que un circuito de psicomotricidad para los niños?
¡Un circuito de psicomotricidad con luz negra! Esta actividad estimula el desarrollo físico y sensorial de los pequeños, al tiempo que les permite disfrutar de un ambiente mágico y diferente.
El circuito puede incluir diferentes elementos como aros, pelotas, túneles, colchonetas y cintas de colores que brillan con la luz negra.
Los niños pueden saltar, rodar, gatear, lanzar y atrapar mientras se divierten y aprenden.