Resumen
En nuestra escuela creemos en la importancia del MOVIMIENTO LIBRE , es decir, en dejar que nuestr@s alumn@s se muevan en libertad, sin la acción del adulto.

En nuestra escuela creemos en la importancia del MOVIMIENTO LIBRE , es decir, en dejar que nuestr@s alumn@s se muevan en libertad, sin la acción del adulto. Es necesario, no perder de vista que cada niñ@ tiene su propia evolución, y por lo tanto, debemos respetarla y acompañarla en los diferentes procesos.
Cada cambio postural, cada paso, cada salto, cada recorrido… ¡Debe ser un logro conseguido por ell@s mism@s!
Es fundamental, no poner a un niñ@ en una postura a la que no ha llegado por sí mism@, así como, no impulsarle a caminar si aún no lo ha decidido , o simplemente, evitar enseñarle cuál es el camino para llegar a su objetivo.
Y entonces… ¿Qué papel desempeñamos los adultos en este proceso?
Pues bien, para que un/a niñ@ tome interés por el MOVIMIENTO LIBRE , para que pueda centrarse en la exploración de sí mism@ primero, más tarde de los demás, y en su entorno, necesita tener claro que sus NECESIDADES BÁSICAS están cubiertas. Cuando hablamos de necesidades básicas debemos hacer referencia a dos conceptos imprescindibles para crecer: el VÍNCULO y el APEGO.
Las palabras VÍNCULO Y APEGO nos llevan a la seguridad y la confianza de un/a pequeñ@ en su referente. Es indispensable que en cada avance se sientan acompañad@s, respetad@s y valorad@s.
Por lo tanto, podemos decir que nuestro papel es fundamental en el movimiento de nuetr@s pequeñ@s. Debemos acompañarles desde una MIRADA RESPETUOSA, considerándoles CAPACES de autorregularse y de dirigir su aprendizaje, mostrándonos DISPONIBLES y demostrando nuestro AMOR INCONDICIONAL. De esta forma, conseguirán la SEGURIDAD y CONFIANZA necesaria para poder centrar su actividad en la exploración y descubrimiento de sí mism@s y del mundo que les rodea.